Pandemia de la incapacidad de leer (spoiler: para eso no habrá vacuna)
2021 está aquí, cuetes y más estupideces dieron la bienvenida al nuevo año, a la nueva década. Me hubiese gustado comenzar con algo más poético y cercano al mundo estético que es del que disfruto hablar, pero no, estoy aquí para descargar mi frustración hacia la estupidez con título universitario.
La pandemia fue oficializada por la OMS hace ya casi un año. Vivir en pandemia es lo normal en nuestras vidas. La misma a generado un interés en la información sobre la enfermedad, sobre sus causas, curas y posibles soluciones en la inmensa mayoría de habitantes del planeta. Al mismo tiempo ha generado cantidades insospechadas de desinformación y, más preocupante aún, cantidad de gente supuestamente educada (con su título colgando en algún lugar de su hogar) que no puede distinguir y leer esa información y termina compartiendo o difundiendo la desinformación.
Leer y distinguir información de chisme y malas teorías conspirativas (por absurdas) es hoy en día objeto raro en una conversación. Parece que si alguien piensa de una forma por más absurda que sea su idea igual tiene validez mediática y prestigio que una información argumentada. Y así llegamos a un tipo que por ser alemán quiere meter Dióxido de cloro por todas partes sin ningún fundamento científico y lo hace de frente y entrevistado en las principales cadenas de noticias de Bolivia, encima se da el lujo de humillar tratando poco más de ignorantes a algunas periodistas que (con poco atino y habiendo hecho el mínimo trabajo periodístico) quieren hacerle preguntas incómodas. Habrá alguno que lee esto y piensa que el dióxido de cloro es una medicina probada contra el COVID, y pues temo decirle a ese crédulo que el hecho que le funcione a una, dos o quinientas o miles de personas, no es prueba científica si no se hace ensayos de laboratorio imparciales en los cuales no se quiten todas las otras alternativas que pueden interceder para que se sane el paciente. En el caso del COVID, lo más probable es que el dióxido de cloro perjudique la salud, y si se sana se hubiera sanado igual sin tomar el no medicamento. (https://www.atsdr.cdc.gov/es/phs/es_phs160.html) Pero si aún así crees, pues lo tuyo ya es religioso y es verdad, puedes creer, y con tu creencia puedes matar a muchas personas, como todas las religiones.
Ahora junto a la segunda ola del COVID y con la llegada de las vacunas se vive también una segunda ola de imbecilidad o incapacidad de leer información. Hay mucha gente “educada” que alegremente decide que no se va a vacunar porque cree que ninguna vacuna es segura. ¡Bravo por la falacia! es decir, por supuesto que ninguna vacuna es segura, tampoco la del sarampión, ni rubéola, ni hepatitis B, ni poliomelitis, y un largo etc. Pues siempre hay una parte de la población que va a presentar alguna reacción. Todo esto lo sabemos y aún así vacunamos a nuestros hijos, aún sabiendo que si no los vacunamos lo más probable es que no se enfermen, porque existe en casi todos estos casos inmunidad de manada. Se trata de una acción en que solucionamos problemas serios en comunidad, porque solo si todos o la gran mayoría tenemos inmunidad, podemos superar esos virus. Pues adivinen, en el COVID es lo mismo y un montón de papafritas olímpicos en gran acto de egoísmo huevón, han decidido que por ahora no se van a vacunar, porque no confían en la vacuna. Ojo esto no solo pasa en nuestras latitudes, Francia divulgaba la pasada semana que 6 de 10 franceses no piensan vacunarse(https://www.dw.com/es/francia-campe%C3%B3n-mundial-de-pa%C3%ADses-refractarios-a-vacuna/a-56090221) Si se informaran, si realmente se informaran, se darían cuenta que las vacunas actualmente aprobadas son por lo menos igual de seguras que las que usamos normalmente, solo que ahora mismo, en medio de la pandemia, los riesgos son aún más altos de contagio y de muerte de un ser querido. Pero Monsieur Papanatas no se va a vacunar porque es incapaz de informarse y de poder leer la información; cree las estupideces que le llegan por WhatsApp porque circulan en su grupo de resistencia Kochala, jóvenes por la democracia, OTB Molle Molle Central, grupo de Docentes universitarios, o ya mero mero su grupo de compartir recetas de cocina, porque seguramente lo que le mandan sus grupos de confianza es información de confianza, y de nada sirve que tenga un título universitario, el güey se la cree. O, tal vez, simplemente no le importa nada más que su propio trasero.
Y así llegamos a donde estamos, el ejercicio de la ciudadanía cada vez muere más, porque muy pocos pueden o quieren hacer el esfuerzo de ejercerlo, porque sí hay que saber encontrar información para esto, hay que cruzar fuentes, hay que usar una metodología de pensamiento crítico y no una teología de le creo porque quien me dijo yo le creo (es decir porque me gusta el chisme). La situación es grave porque la democracia en estas condiciones no tiene ningún sentido. La gente claramente va a votar por cualquier cosa, y eso va a llevar a que nos lleve la fregada y algún grupúsculo violento y con poder (seguramente económico) tome con aún más fuerza el control de todo (no sólo nuestra vida). Esto no es una teoría de la conspiración, los lobbies existen, las farmacéuticas pagan, los bancos pagan para lavarse su imagen y los juegos de poder existen desde siempre y el más rico siempre gana. Y sin embargo, ni el más rico puede meterse en nuestra cabeza y evitar que sepamos leer. A no ser que renunciemos a leer y es eso justamente lo que está pasando y no necesariamente en los sectores populares, sino sobre todo en aquellos que se dicen estudiados y andan poniendo por delante de su nombre un título profesional para disimular su ignorancia.
Encore une fois merci. Oui, ne pas croire et toujours aller chercher encore à comprendre, à savoir au risque de se retrouver seul parce qu’aujourd’hui le réseau social qui fonctionne est une toile d’araignée qui emprisonne plus qu’elle ne tisse!
Utilisons internet pour aller se creuser la tête à lire les rapports et études approfondis de ceux qui ont dépensé du temps à la recherche.
Évidemment cela demande plus de temps que de regarder une vidéo Ted Show, ou lire un message whatsapp…
Mais oui, mon vieil Ami, restons esthétique, continuons sans relâche notre recherche de la beauté et nous savons tous les deux que la beauté se révèle avec le temps.
Vive la critique, vive le ciel, vive la mer.
Merci Anne, Merci le Ciel, Merci la vie pour de gens comme toi!